Respuestas contestadas de manera conjunta entre Irene Bajo, vicepresidenta del patronato, y Javier Sogorb, director gerente de la Fundación Caja Mediterráneo.
1. ¿Cómo ha afectado la pandemia del covid-19 a tu organización?
Nuestra Fundación, en su apuesta por contribuir al desarrollo económico y social de nuestra zona de influencia, desarrolla acciones culturales, formativas y divulgativas, dirigidas un amplio segmento de público. Lamentablemente la mayor parte de las iniciativas programadas han debido ser canceladas o aplazadas ante la imposibilidad de asistencia de público. Todos nuestros centros han tenido que ser cerrados al público.
¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrenta?
En estos momentos no sabemos cuándo podremos retomar nuestra actividad con cierta normalidad, ya que, aunque finalice el confinamiento de la población y entremos en una fase de desescalamiento, la obligatoriedad de mantener una distancia social va a perdurar en el tiempo. Esto va ocasionar que tengamos que modificar el formato de algunas propuestas, que tengamos que cancelar otras y que debamos desarrollar nuevas iniciativas que den respuesta inmediata a las necesidades surgidas. En este sentido uno de los retos a que nos enfrentamos es el de poder ofrecer un mayor número de actividades y servicios a la ciudadanía de manera no presencial mediante canales web, mediante las oportunas e tecnológicas. Por otra parte, esta organización, al igual que el resto de entidades, instituciones, empresas, etc va a tener que hacer un esfuerzo de adaptación a los nuevos escenarios que se nos presenten, cuyo alcance real todavía no podemos alcanzar a vislumbrar. En este sentido estamos muy atentos a los cambios que se van viendo o intuyendo para ajustar nuestra planificación estratégica para los próximos años a las nuevas necesidades de la sociedad post-COVID-19.
2. ¿Crees que tu sector empresarial, el gobierno y/o la sociedad civil debe realizar alguna acción en especial para paliar los efectos de esta crisis a medio y largo plazo? Nosotros somos una Fundación con vocación de atender a las necesidades de la sociedad en los ámbitos cultural, educativo y en la sostenibilidad medioambiental, social y laboral. Resulta urgente encontrar la manera de ayudar a todos aquellos colectivos que, como consecuencia de la pandemia, ven reducido su acceso a servicios y productos básicos, pero al mismo tiempo necesario planificar un futuro en el que el COVID-19 no incremente las brechas económicas, sociales y culturales que ya presentaba nuestra sociedad. Llegar con nuestras acciones a todas las capas sociales debe ser una prioridad. Gobierno y sociedad civil debemos trabajar mano a mano, junto al sector privado, para, de manera colectiva y coordinada, se reduzcan esas brechas.
3. ¿Cómo crees que será el escenario posterior a la crisis? ¿Cambiará el tipo de relación con tus empleados, clientes, proveedores, y el resto de grupos de interés?
Las consecuencias de esta crisis sanitaria van a ser duras, y tendrán una influencia a medio plazo en muchos aspectos de la sociedad. Una entidad como la nuestra tiene razón de ser si es útil a la sociedad y se adapta a las necesidades del momento para ofrecer que se espera de ella. Antes del inicio de la crisis estábamos sentando las bases del nuevo Plan Estratégico 2021-2024 de nuestra Fundación . Mucho de ese trabajo deberá ser ahora revisado y debemos rediseñar la propuesta del Plan con el fin de adaptarnos a las nuevas necesidades y demandas sociales que surgirán tras la crisis, como decíamos en el punto 1. El escenario es imprevisible si bien ya se atisban algunos efectos que pudieran derivarse, como una tendencia desglobalizadora, valorando más lo próximo, la apuesta por los medios tecnológicos y no presenciales, y una mayor conciencia comunitaria y de solidaridad, junto con unas importes consecuencias económicas y sociales. En este contexto creemos que la apuesta por el teletrabajo acompañado de una mayor conciencia de equipo en los empleados ha venido para quedarse. Con clientes, proveedores y resto de grupos de interés consideramos que la vulnerabilidad de una sociedad que se consideraba indestructible nos llevará a potenciar en mayor medida los valores y principios éticos en nuestras relaciones y poner más si cabe el foco en una visión a escala más humana y dirigida a la satisfacción de sus necesidades.
4. ¿Qué acciones ha llevado a cabo tu organización para ayudar a los más vulnerables en estos momentos?
Puesta disposición de nuestras instalaciones a las Comunidades Autónomas de la Región de Murcia y de la Comunitat Valenciana, así como a los ayuntamientos de los municipios en que se ubican a fin de que puedan ser usadas para lo que pueda ser necesario a fin de hacer frente a la pandemia y sus consecuencias sociales y de salud pública.
5. ¿Cómo crees que afecta a la globalización? ¿Cómo crees que afecta a las tecnologías? La globalización plantea tantas oportunidades como riesgos. Esta pandemia se ha extendido por todo el mundo por la gran movilidad que presentamos los humanos, pero también por la inexistencia de condiciones sanitarias mínimas en un planeta globalizado. Debemos entender que la globalización debe ir acompañada de la garantía de acceso a condiciones de vida, trabajo y salud dignas a la ciudadanía, además de un cuidado especial hacia la sostenibilidad medioambiental y social. Por su parte, la tecnología es, como toda herramienta, neutral, y sus efectos positivos o negativos dependerán de lo que se haga de ella. Quizá esta pandemia obligue a reflexionar, por una parte, en relación a esa especie de fe absoluta en la asociación entre tecnología y progreso, y, por otra parte, en relación al uso que se hace de los avances tecnológicos, y el reducido porcentaje de la población que se beneficia de los mismos.